viernes, 25 de mayo de 2012

Que tuvo que morir mañana.

(Ilustración de Dino Valls : Vera Icon)

Cuando la lágrima toca el suelo,
exhausta,
la inundación es innevitable,
los perros ladran llagas famélicas
y los gatos ni siquiera divisan la noche.

Antes hubo un trayecto,
una sinuosa curva
por la que la lágrima danzó transparente,
bebiéndose las calles con los ojos
y las ciudades
y el zigzagueo de los trenes,
hasta ser tan previsiblemente grande
que terminó desmoronando
la imperturbabilidad ocular de su dueña;
hasta ser tan imaginablemente grande
que el idílico interior
tallado de experiencias
se tornó grotesco,
flácido
vacío,
y fue entonces cuando los perros se volvieron del revés
y los gatos se arrancaron los ojos en silencio
sorprendidos por la súbita finitud de la vida.


(Tan potencialmente grande

34 comentarios:

  1. Los gatos son tan celestiales que incluso arrancándose los ojos callan. Hoy, que leía la noticia de sucesos en un periódico de aquí de Barcelona: "Padres arrancan con una cuchara los dos ojos de su hijo en un ritual satánico" (ya sabes qué poco contrastan las informaciones satánicas los periódicos y la prensa en general), pensaba que la histeria humana está a punto de culminar, y que la vida, afortunadamente, es un hecho temporal: bueno y horrible.

    (Soneto).
    Un saludo.

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  2. Imposible morir hoy u ayer... ;)

    Un beso!

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  3. Aplaudo!!! Este poemo está tan lleno de imágenes que se van deslizando ante nuestros ojos en el deambular de esa lágrima. Me estaba preguntando qué será de nosotros el día que los gatos se arranquen los ojos, pero la apreciación de Marc Verlén desvaneció mi pregunta en el aire. Cada día me gustan más tus poemas, querida. Besos y que pases lindos días(ya queda menos!!)

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  4. Sé muy bien que cuando la lágrima toca el suelo todo eso sucede.
    La vida es finitud, pero que los gatos se arranquen los ojos me preocupa.

    Besos

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  5. La retina, el rito, el rictus. A veces me pregunto si somos tan importantes, si siendo la mayor parte de nuestro ser líquido dispuesto a regar la tierra, debemos darle o no, relevancia al detener una lágrima hasta decir que es real o dejar, su curso para no reconocer...(esta noche he soñado que mi gata perdía un oko) ...que en la pequeña extensión que pissamos, no es la única (es cierto)...

    un abrazo noctívaga

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  6. ojo, me jugó una mala pasada el teclado

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  7. un poema onírico y hermoso, cargado de imágenes intensas. Me gusta, saludos

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  8. Qué bueno qué bueno qué bueno!! Pues me alegro de que hayas llegado a mi blog, así he podido llegar al tuyo :D
    Un saludo

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  9. Yo me animaría a morir, sin embargo.
    Gracias por la fidelidad con mi escritura. Leí el mensaje, sólo que por falta de tiempo no lo respondí así como tampoco respondí a nadie. Necesito un día de 48 horas.

    :)

    Un beso. O dos.

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    1. Te entiendo. Yo también ando agonizando últimamente por el estrés de tener demasiadas cosas que hacer.
      Me alegra que hayas seguido escribiendo :)

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  10. Y a los toros que nos pasó?
    Dímelo, dímelo!!!

    Besos.

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  11. El dolor casi siempre ocurre así, en ralentí, y el surco de una sola lágrima es un camino en el que puede caber casi todo. Yo no sabría decir ese todo. Tú lo has hecho.
    Un abrazo.

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  12. Las que crecen en la garganta, esas son las peores. 'Tan potencialmente grande que tuvo que morir mañana'. Me encanta. Un abrazo!.

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  13. La evolución de esa lágrima me conmueve. Como esos perros y esos gatos sorprendidos por mutaciones inesperadas. Siempre tan genial, querida. Y ese Dino Valls tan adecuado a tu surrealismo.

    Por cierto, esta mañana he visto a una chica que era literalmente una pintura de Dino Valls. He estado a punto de pararla para decírselo, pero pensé que se burlaría de mí, o pensaría que quería ligar con una excusa tan original como patética.

    Un beso!

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  14. Un torrente que arrasa y desprende.

    Un abrazo.

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  15. Hola, paso a desearte feliz fin de semana.
    Un beso

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  16. ojo, que bella imagen de encabezado

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    1. ¡Gracias!
      Dice Vera que es semejante a una mujer medusa al igual que yo, y ya sabes que Vera es muy sabia.

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  17. "Cuando la lágrima toca el suelo,
    exhausta,
    la inundación es innevitable,
    los perros ladran llagas famélicas
    y los gatos ni siquiera divisan la noche..."

    Impresionante todo.

    Abrazos desde Barcelona.

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  18. Inundación de lágrimas que caen hasta topar al suelo, inundación que se hace lluvia, que se hace charco.

    Muy bello tu texto, amiga mía.

    Un beso.

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  19. Una lágrima que conmovió el mundo. Y lo trasformó. Qué dureza cuando el agua y la sal trannsforman todos los recuerdos.
    Grandes imágenes, por cierto.
    Saludos.

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  20. me gusta. cada día una vida

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  21. Eres grande, sin el potecialmente, simplemente grande!

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  22. Hay curvas y trayectos que vale la pena contemplar, aun siendo tragedias, tanto como leerte en silencio, de noche, sin vecinos; escuchando las atenciones de perros y gatos en el devenir de sus correrías y lo que esconden sus lamentos...

    Besos

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  23. Muy bueno!!!Me ha impactado " los gatos se arrancaron los ojos en silencio
    sorprendidos por la súbita finitud de la vida"

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  24. "y fue entonces cuando los perros se volvieron del revés
    y los gatos se arrancaron los ojos en silencio
    sorprendidos por la súbita finitud de la vida."

    Bravo! Has hecho que se desintegre el cosmos por completo. Un abrazo entre atardeceres con resaca. Mua!

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  25. Lo del final me ha recordado a un capítulo de Los Simpsons que se vuelven del revés... jajaja.

    Las lágrimas tienen mucha fuerza, aunque sólo sea una la que se derrama...

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  26. ¿Que pasa que Ella teme encontrarse con su peor pesadilla: ser feliz? No debería acostumbrarse al dolor, pues también puede llegar a ser muy tedioso.

    Un beso.
    HD

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    1. quien ha experimentado el dolor nunca se atrevería a calificarlo como tedioso.

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    2. Cuando se hace presente el dueño de la Verdad yo debería llamarme a silencio, ¿no?

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  27. Hay momentos en que a mí también me gustaría volverme del revés. Pero en fin, qué se le va a hacer...

    Saludiness!

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  28. me gusta el ritmo de este poema y el final suena como la cadencia de un bajo profundo y decadente.
    inmenso abrazo Esther.

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  29. Un poema precioso...pero muy duro.
    Mis felicitaciones. Un abrazo.

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