jueves, 20 de mayo de 2010

Inauguración del blog.




El calor derrite muy pronto los helados.
El frío hace que se hielen demasiado y que cueste coger pedacitos de ellos.
Como el punto medio no existe, me quedo con los helados muy fríos, con aquellos que son como un caramelo algo duro al principio pero que pasado un rato se acostumbra a ti, coge confianza y se deshace.




Los seres humanos al fin y al cabo somos como los helados. Unos somos de invierno y otros de verano.

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