viernes, 14 de marzo de 2014

π

(Ilustración de Harriet Lee-Merrion


 y
en el sórdido confort de la casa paterna
saben que no regresarán nunca más

Al Berto

extraigo mis desvaríos
caricias que deposito en una hoja de papel ardiendo
notas de voz
susurros bruscos de un cuerpo a otro

nada sigue igual
las arrugas se entremezclan oscuras
se vierten
y ya no (me) alumbran

agradezco el número pi
el ambiente desasogante culpable
a
veces
de mi ubicación cada vez menos arbitraria

sangre que me mantiene despierta

10 comentarios:

  1. Me chifla lo de las caricias en ese depósito que se transforma, ya, ya mismo, en ceniza- ¡Potente!

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  2. Me llegas, y no creas que me llegan todos.

    Un beso Esther, eres grande.

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  3. Mis desvaríos y yo te miramos asombrados.

    Y al número pi le damos un abrazo.

    Y a ti dos besos.

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  4. Las arrugas no creo puedan alumbrar nunca, están marchitadas, pero no tus palabras que siempre me dejas admirada.

    Un placer leerte.

    Feliz fin de semana.

    Un beso.

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  5. Qué maravilla de composición, Esther. Un besazo y feliz cumpleaños. Pásalo bien.

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  6. La sangre siempre nos mantiene despiertos. El infinito en tus palabras que bonito :) Besos guapa y gracias por las visitas a mi blog!

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  7. Siempre la sangre nos mantiene despiertas. Besos Esther y abrazos.

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  8. Tu sangre ruge... sin dudas... Un abrazo.

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