(Fotografías de Le Souffle blanc: The water in the glass depends on air mass)
Ella vuelve
-entera-
y se ahoga en vendas
por si el sucio licor
le vomita dentro
y le azota las mejillas
con la mortalidad
de sus órganos
y afluentes.
Ella se amasa los huesos
-pero las costillas
creciendo
y atrapándola
y el hedor a noche-
porque tiene miedo
a que lo implícito del negro
le arranque
las prolongaciones
de los sentimientos.
esther, sos un animal, una bestia poética.
ResponderEliminareste poema me flasheo, y el final, me dejo boquiabierta.
beso grande
Dan ganas de rescatarla.
ResponderEliminarPero es imposible.
Lo tiene que vivir.
Besos.
A ver si lo negro, lo oscuro o aunque sea lo claro me arranca de una vez por todas los sentimientos que he perdido y ya no puedo expresar :(
ResponderEliminarTe amo, Esther! Precioso, como siempre, como tú.
Lo terrible siempre auspiciándose desde dentro...Muy bueno. Beso, Esther querida...
ResponderEliminarTal vez lo oscuro la conforte, y en la oscuridad se sienta como pez nadando en el agua. Quizás, también, el negro valga para drenar las heridas. Perfecto, como siempre. Un abrazo.
ResponderEliminarEl miedo forma parte de la vida.
ResponderEliminarImpresionante tu texto, como siempre, me dejas atontada cuando te leo que ni sé qué comentarte.
Un beso.
Por eso hoy me he entregado al rojo... ;)
ResponderEliminarBesos!
Amo tu poesía, tanto que me duele por acá, en el plexo solar. Saludos.
ResponderEliminarImpresionante. Una bomba latente en la mano es lo que tenés.
ResponderEliminarHe quedado perplejo. Es el primer poema tuyo que leo y me ha calado muy hondo, me encanta tu estilo desgarrado. El final es sublime, te felicito.
ResponderEliminarEstos son unos versos tremendos!!
ResponderEliminarBesos y se feliz!
Me encanta esa tendencia surrealista que tienen tus versos.
ResponderEliminarMuchos besos Esther.
Y cuando la hiedra haga una maraña de sentimientos, el miedo no encontrará como penetrar la barrera que protege a su corazón.
ResponderEliminarBesos.
Me gustan tus metáforas de la noche. Tenes un estilo muy propio
ResponderEliminarMe sumo a la masa, lo hiciste como lo hace el vómito oscuro mientras cae de las tráqueas blancas.
ResponderEliminarUn beso Esther.
Yesterday I woke up sucking a lemon...
ResponderEliminarNo importa cómo empieza la noche, sino como acaba. Del cáliz de ese licor negro, amargo de hastío y arrepentimiento, he bebido yo muchas mañanas de clavo en la frente.
Menos mal que la edad ya está poniendo "everything in its right place". Menos mal. O no.
Me he quedado pillado con una de las etiquetas: frágilmente transparente... Soy así, qué le voy a hacer. Tú eres asombrosa.
ResponderEliminarParece que siempre volvemos a ser enteros con la luz del día, y en la noche, en la obscuridad, nos despedazamos, caóticos, esperando a salvarnos de nuestros propios miedos.
ResponderEliminarY sin embargo la oscuridad me atrapa tanto... y me dejo atrapar.
ResponderEliminarUn beso.
HD
Si que mola ver pelis de la infancia y recordar sensaciones. Un hombre lobo americano en Londres junto con El exorcista y el videoclip de Thriller, fueron mis grandes pesadillas.
ResponderEliminarBueno, y un vecino que era muy feo también.
Abrazos.
Brutalmente increíble. Me encanta.
ResponderEliminarUn abrazo!
La daría la mano para rescatarla, pero jamás de tu poema.
ResponderEliminarQué bueno es.
Besos
Intensa poesía, esta que le dedicas a ella.
ResponderEliminarBesos. Muy buena, Enhorabuena.
Bueno, ella es la obscuridad, está claro, lo pone en el título.
ResponderEliminarEso siempre invita a reflexionar, bonita obscuridad.
Besos.